Los niños son propensos a muchas enfermedades y virus. Sin embargo, hay algo en lo que hay que tener mucho cuidado y estar pendientes: las alergias. Por eso, es importante que sepas cómo afecta a los niños la alergia a picaduras de insectos.
En la vida, todos somos propensos a picaduras de insectos, tales como abejas o hormigas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que este tipo de picaduras en niños pueden ser peligrosas; sobre todo si el niño es alérgico.
Las picaduras de insecto, a un niño alérgico pueden ocasionarle una serie de reacciones que son graves. Como bien sabemos, hay un tipo de insectos cuyas picaduras son mortales, como el alacrán; pero también están aquellos insectos que, a pesar de no ser mortal su picadura, en caso de alguien alérgico, la picadura puede representar un mal letal.
Para saber las consecuencias de la alergia a picaduras de insectos, primero es importante conocer cuáles son los insectos que podrían desencadenar reacciones alérgicas. Entre ellos se cuentan: las abejas productoras de miel, o abejas melíferas; las avispas germánicas, así como los avispones y las hormigas rojas. Ahora bien, cuando una persona es picada por alguno de estos insectos, estos inyectan veneno a través de la piel. Por lo general, las picaduras son su mecanismo de defensa ante amenazas.
Ahora bien, cuando un niño recibe una picadura, por lo general no reacciona ante esta; más bien, la reacción alérgica se produce después de la segunda picadura, o incluso después de esta. Es decir, que pueden pasar varias horas de la picadura para que se produzca la reacción.
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Tratamiento para la alergia a picaduras de insectos
¿Cómo se trata la alergia a picadura de insectos? Teniendo en cuenta que los niños son muy curiosos, es recomendable llevar consigo un kit o equipo para tratar la alergia a picaduras de insectos.
Es recomendable tener a la mano un inyectable de adrenalina o epinefrina; esto en caso de que haya una reacción grave. Por otro lado, es importante que este medicamento así como cualquier otro antialérgico, sea recetado por el médico pediatra; no es recomendable la automedicación.
Además, es importante advertirle o informar al personal escolar de la alergia a picaduras de insectos, tanto a profesores como empleados. Así, ellos estarán al tanto para evitar cualquier percance. Es recomendable también que el niño cargue consigo una pulsera o brazalete de alerta médica; de esta manera, se podrá obtener respuesta inmediata ante cualquier picadura.
¿Qúe sucede cuando con la alergia a picaduras de insectos?
Es importante tener claros cuáles son los síntomas de la alergia a picaduras de insectos. De esta forma, como padres, podrán identificar si sus hijos son o no alérgicos a la picadura de insectos.
En primer lugar, el sistema inmunitario de una persona alérgica reacciona de una manera exagerada a las proteínas del veneno, tanto así que el cuerpo, los mecanismos de defensa, interpretan que dichas proteínas son invasores dañinos.
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En este sentido, el sistema inmune intenta enfrentar al invasor, provocando de esta manera, la liberación de una variedad de sustancias químicas que hacen que la persona presenten varios síntomas, como los que mostraremos a continuación:
Respiración sibilante, tos, dificultad para respirar, ronquera; obstrucción de la garganta, vómitos, diarrea, dolor de estómago; hinchazón ocular, urticaria; ronchas o granos de color rojo; inflamación de la piel. Además, se disminuye la presión arterial, provocando de esta forma mareos o incluso pérdida de la consciencia.
Así que es importante estar atentos a estos síntomas en su conjunto. Al momento del niño presentar estos síntomas, es importante llevar al niño a un pediatra para hacer el diagnostico y también tener el tratamiento adecuado para el tipo de alergia a picaduras de insectos.
Lo que produce la alergia a picaduras de insectos: Anafilaxia
La reacción a la picadura de insectos se conoce como anafilaxia. Esta se manifiesta, por lo general, como una reacción leve, pero que luego empeora de forma rápida; en consecuencia, la persona puede sufrir de problemas respiratorios o incluso perder el conocimiento.
Así que si el niño comienza a presentar alguno de estos síntomas ya mencionados, como enrojecimiento o inflamación de la piel, la lengua o los labios, tiene que suministrar la adrenalina o el anti-alérgico de forma inmediata. Por eso es importante que lo lleve todo el tiempo, pues de eso dependerá la vida del niño.
Luego de este episodio, es importante que lleve al niño a un hospital, pues podría repetirse otro episodio. Allí los médicos suministrarán los medicamentos necesarios para combatir la alergia.
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Ahora bien, los auto inyectables son recetados por el pediatra; este le dará instrucciones sobre cómo usarlo. Incluso, si el niño está en la capacidad suficiente de saber manipularlo, se lo puede suministrar por su propia cuenta.
Como ya le mencionamos, debe tomar las precauciones necesarias para evitar cualquier picada de insectos. También debe notificar a la escuela y a los profesores de su hijo el tipo de alergia, de esta forma, ellos estarán al tanto y sabrán qué hacer en caso de emergencia.
En caso de que el aguijón del insecto se adhiera en la piel, debe retirarlo lo más pronto posible. En este sentido, puede usar una tarjeta o cualquier cosa que le permita sacarlo. Si lo logra, evitará que entre más veneno al cuerpo del niño. En caso de no poder, deje que los doctores lo hagan. No vaya a usar pinzas, esto agravaría la situación.
Precauciones para evitar las picaduras
Para evitar la alergia a picaduras de insectos, es importante tomar las siguientes precauciones:
No andar descalzos sobre la grama, o césped.
Evitar jugar en lugares donde puedan llegar los insectos, como los lechos de flores.
Es importante revisar los recipientes antes de ingerir alguna comida o bebida. Hay insectos como las hormigas, o las abejas que pueden estar cerca y meterse en algún recipiente.
Cubrir bien el cuerpo cuando se esté en zonas al aire libre, en lugares boscosos y sitios por el estilo.